1. El objetivo de cada nivel es acabar con tantos enemigos como sea posible, sufriendo la menor cantidad de daño posible, y equipando los objetos que mejor nos vengan. Esta es la teoría. En la práctica, lo más importante es no ser codicioso.

2. Toma tantos desvíos como puedas. Especial hincapié a la palabra 'puedas'. No te metas en un 'reckless' si no estás bien preparado. No te metas en un pozo si no tienes una moneda para tirar. No te metas en un 'dark for days' salvo que estés intentando conseguir el logro. Pero en general, intenta alargar el camino todo lo posible. Cuantas más habitaciones, más enemigos, más almas, mejor equipo.

3. Localiza a los enemigos explosivos. Tómate unos cuantos segundos. Calcula sus movimientos y no te pongas en una situación peligrosa nada más empezar. No te muevas o ataques de forma instintiva al entrar a una nueva habitación.

4. No equipes objetos sin ton ni son. En el punto uno hablo de equipar los objetos que mejor nos vengan y lo digo en serio. Es tentador recoger todos los objetos que encontramos y equipar todo lo que nos dé un punto más en cualquier atributo, pero hay que resistir el ansia. Observa bien cada objeto. Una mala decisión en este aspecto puede destruir un 'run'.

5. Todos los atributos son importantes. Pero. Al principio es vital subir la velocidad. Una buena velocidad es la diferencia entre recibir golpes innecesarios y no hacerlo. Al menos 20 es el objetivo para cuando estemos en la recta final.

6. Ataque es muy importante. Pero. Ataque es un atributo especial, porque si bien nos permite acabar más rápido con los enemigos, no es lo único que nos permite hacerlo. Podemos tener ataque -1, que si infligimos 6 puntos de veneno por turno, la mayoría de enemigos nos durará muy poco. Lo mismo sucede si infligimos daño por almas, por luz o por maldición.

7. Defensa es fundamental. Pero. Como con velocidad, deberíamos tener al menos defensa 20 cuando entremos en la recta final, pero no mucho más. ¿El motivo? Casi todos los enemigos hacen daño perforante que vamos a recibir igualmente. Así que nos va mejor invirtiendo esos puntos extra en salud.

8. Necesitas una fuente de salud fiable. Si tenemos la 'clarity' baja (algo habitual), es imperativo tener el libro de hechizos de curación, el casco de curación, la armadura de curación o cualquier otro objeto que nos garantice recuperar puntos de vida. O una auténtica montaña de puntos de vida.

9. Cuidado con los objetos que dañan al enemigo cuando te ataca o lo esquivas. Parecen una buena idea hasta que intentas pasar de largo a un enemigo explosivo.

10. Sinergias, sinergias, sinergias. Los objetos que dañan al enemigo cuando te ataca, como el escudo o la armadura de pinchos, son malos por lo general... salvo que tengas el colgante que hace que los explosivos te curen. De la misma forma, la corona que hace que todos tus ataques congelen si tienes menos de cuatro objetos es mala... a no ser que efectivamente tengas menos de cuatro objetos. Incluso los objetos más inútiles tienen potencial si los combinas bien. Prueba.

11. Usa el 'reroll'. Si no te gustan los dos objetos que ves, cámbialos. No te cortes en usar el 'reroll' dos o tres veces seguidas si hace falta. Y ya que estamos, a partir del nivel 10 más o menos, no pagues por abrir ningún cofre que no sea de oro... asegurándote de tener al menos 20 almas adicionales para hacer un 'reroll' por si acaso.

12. En 'Patience' elige un camino y cíñete a él. El truco para afrontar el nivel 'patience' es elegir izquierda o derecha y avanzar hacia la salida en la misma dirección en cada turno. Si lo haces así, no tendrás problemas y normalmente recibirás buenas recompensas.