Clásico en tercera persona con ciertas limitaciones debido a su época pero con una historia bien enlazada mientras vas progresando en cada misión hacia su desenlace.
Si tengo que enumerar algunos aspectos positivos, diría que no es un juego de disparos en tercera persona al uso. Está enfocado básicamente para que seas lo más sigiloso posible, usando la estrategia y el engaño en cada momento. De hecho, es muy complicado terminar una misión a la primera sin haber hecho un reconocimiento previo del terreno. Quizás en alguna ocasión el uso de la fuerza bruta a bombo y platillo te sea útil pero en la mayoría de los casos deberás recurrir a las habilidades especiales del personaje.
A mi modo de ver es un juego difícil ya que aunque vayas bien protegido si te disparan a la cabeza morirás al instante (realista) y tendrás que empezar la misión de nuevo. Y aunque recibas disparos en el torso no aguantarás mucha metralla.
Dejando a un lado los bugs, que los tiene, lo recomendaría para todo aquel que le guste los retos. Cada misión es muy distinta de la anterior y en cada una de ellas puedes tomar distintas decisiones hasta completarla.