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Me dije, ¿Es posible enseñarle a mi perro cuestiones políticas, y que esté pueda comprender el socialismo, para más tarde dialogar con el comunismo?
Así que llegando a casa, ♥♥♥♥ a mi perro en una silla cerca de mi escritorio, quite mi libro de historia universal de la la librería, y lo abrí frente a la cara de mi perro. Él me veía sin comprender las cosas, pero le empecé a leer, su cara de curiosidad cambio por una cara más seria al paso del tiempo. Llegando a las 12 de la noche, 2 horas de hablarle a mi perro, le pregunté que le había parecido el socialismo, y como éste fracasa cada vez que un gobierno lo implementa.
Él me vio, lo pensó por un minuto y me dijo... WOW!