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Las zanahorias y las manzanas son muy valiosas para tentar a los más maniáticos, pero los burros con problemas dentales pueden tener dificultades con ellas.
Zanahoria y manzana rallada sería lo ideal en esos casos pero también se pueden utilizar zanahorias de lata o un poco de salsa de manzana.
En "El Refugio del Burrito" también nos hemos dado cuenta de que a los burros les gusta la remolacha azucarera como añadido a su dieta normal.
Otra manera de tentar a los comedores maniáticos es añadiendo una pequeña cantidad de refresco de menta en la comida, lo que le proporciona un rico aroma y sabor.
Por último, los burros adoran las galletas de jengibre pero hay que tener cuidado porque contienen mucho azúcar y pueden llevar a los burros a sufrir sobrepeso u otros problemas de salud.
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