Installa Steam
Accedi
|
Lingua
简体中文 (cinese semplificato)
繁體中文 (cinese tradizionale)
日本語 (giapponese)
한국어 (coreano)
ไทย (tailandese)
Български (bulgaro)
Čeština (ceco)
Dansk (danese)
Deutsch (tedesco)
English (inglese)
Español - España (spagnolo - Spagna)
Español - Latinoamérica (spagnolo dell'America Latina)
Ελληνικά (greco)
Français (francese)
Indonesiano
Magyar (ungherese)
Nederlands (olandese)
Norsk (norvegese)
Polski (polacco)
Português (portoghese - Portogallo)
Português - Brasil (portoghese brasiliano)
Română (rumeno)
Русский (russo)
Suomi (finlandese)
Svenska (svedese)
Türkçe (turco)
Tiếng Việt (vietnamita)
Українська (ucraino)
Segnala un problema nella traduzione
Al principio pensé que era solo un tipo raro, pero pronto descubrí que había ganado más casos de los que nadie podría explicar, probablemente porque entendía las leyes del universo de una manera que ni los abogados más serios se atreverían a intentar. Hoy le debo gran parte de mi carrera, aunque no estoy seguro de si aprendí de la ley o de alguna magia extraña.
Me alegra saber que sigues ganando juicios que ni los tribunales saben que existen.
Saludos, abogado del caos cósmico.
█▀█ █▀█ █▀▀ █▀▀ ░█░
█▄░█ █▀▀ █░█░█ █▄█ █▀▀ ▄▀█ █▀█ █
█░▀█ ██▄ ▀▄▀▄▀ ░█░ ██▄ █▀█ █▀▄ ▄
▀█ █▀█ ▀█ █▀
█▄ █▄█ █▄ ▄█