Sonic Frontiers no es solo un juego: es una experiencia, que te hace sentir la libertad, la velocidad y la emoción como nunca antes en la franquicia. Desde que lo empecé, me atrapó con su jugabilidad rica y sorprendentemente variada. No es solo correr rápido, es explorar, descubrir, luchar, resolver, y sentir que cada rincón del mundo tiene algo por ofrecer. El control de Sonic se siente ágil, preciso, pero también libre, como si el juego te dijera constantemente: “Ve, explora, experimenta”.

Y aquí es donde Frontiers realmente se diferencia del resto de la saga. Juegos como Sonic Unleashed ya habían mostrado una ambición impresionante con sus tramos de velocidad y sus escenarios de escala global, (ademas de su historia hermosa y niveles culiaos buenos) muchos aún lo recuerdan por su increíble apartado visual y su legendaria banda sonora. Pero Frontiers toma esa misma ambición y la lleva a otro nivel, dándole a Sonic un mundo abierto donde no solo corre: vive, interactúa, evoluciona. Es como si todo lo aprendido en títulos pasados hubiera sido una preparación para este momento.

Y el soundtrack… ¡qué joya! Es uno de esos casos donde la música no solo acompaña, sino que potencia cada momento. Las pistas suaves durante la exploración te envuelven y te relajan, pero cuando llega una batalla contra un Titán, el cambio a temas vocales potentes y cargados de energía te pone la piel de gallina. La música no solo suena bien; cuenta historias, eleva emociones y convierte cada momento clave en algo inolvidable.

Y lo mejor de todo es que aún me falta mucho por jugar. Apenas he arañado la superficie de lo que Frontiers tiene para ofrecer, y ya se siente como una de las entregas más emocionantes de toda la franquicia. Si esto es solo el principio, no puedo esperar a ver lo que viene más adelante. Sonic está más vivo que nunca. GOD JUEGOOO.

Mario odyssey but for furries. 10/10

Great Boss fights amazing story this really is a great game it was a great introduction to open world sonic games and I would definitely play again